«Las cosas pueden empeorar antes de mejorar», dijo la directora general de la Organización Mundial de la Salud en Río de Janeiro al finalizar una misión en Brasil, epicentro mundial del brote de zika, cuyo vínculo con la microcefalia llevó a la OMS a declarar una alerta sanitaria mundial.

Margaret Chan inició hoy una visita a Brasil, uno de los países más afectados por el virus del zika, y expresó un claro respaldo a las medidas adoptadas por el Gobierno para el combate al mosquito Aedes aegypti.

«Se está haciendo todo lo necesario para combatir a ese mosquito testarudo», declaró Chan durante una visita a un centro nacional de control de epidemias situado en Brasilia, al que se dirigió tras una reunión con la presidente del país, Dilma Rousseff.

Sin embargo, Chan instó también a que «toda familia, cada uno de los miembros de la sociedad, asuma su debido papel para contribuir con el combate al mosquito», que transmite tanto el zika como los virus del dengue y la chikungunya.