Un día como hoy, del año 2016 fallecía Carrie Fisher, a los 60 años, luego de sufrir un ataque al corazón.

 

Un año después de esa trafica fecha, los fans de Star Wars mantienen en sus mentes el recuerdo de la princesa Leia, mientras el público en general redescubre la figura de una mujer carismática que apostó su existencia a la total valentía.

La reciente película de Star Wars: Los Ultimos Jedi, con una última aparición de Fisher en el cine, cerró un año de numerosos homenajes a la actriz, que murió a los 60 años en Los Ángeles, el 27 de diciembre de 2016, cuatro días después de haber sufrido un ataque cardiaco en un avión. El destino decidió dar un toque final perverso ya que, después de un día de la muerte de Fisher, falleció su madre, Debbie Reynolds, la inolvidable estrella del musical Singing In The Rain (1952).

La muerte de Fisher no alteró los planes de Star Wars: Los Ultimos Jedi, el octavo episodio de la famosa saga galáctica creada por George Lucas, ya que la actriz había terminado de grabar sus escenas.

Así, la promoción y el propio film se transformaron en un testamento cinematográfico de la artista, tanto que, en los créditos de la película se lee la siguiente dedicatoria: “En memoria de nuestra princesa Carrie Fisher”.