Hoy se conmemora el día Mundial del Autismo y es muy importante hablar del tema:

El autismo, o Trastorno de Espectro Psicológico, se caracteriza por la intensa concentración de una persona en su propio mundo interior y la progresiva pérdida de contacto con la realidad exterior.

Su diagnostico puede ser relativo, se realiza mediante la observación y algún test que evalúe el comportamiento del menor.

Se estima que 1 de cada 160 niños en todo el mundo tiene un TEA, según datos de la Organización Mundial de la Salud, pero se cree que existe una gran disparidad de género en los diagnósticos.

Una madre abrazando a su hija.

Nuevas investigaciones científicas en Reino Unido, diseñadas específicamente para detectar las características del autismo en las mujeres, sugieren que la proporción real de casos de autismo podría ser de una mujer cada tres hombres.

Si esto es correcto, cientos de miles de niñas en todo el mundo viven con la discapacidad sin siquiera saberlo.

Las señales de autismo en niñas y mujeres no son los mismos que en niños y hombres. Más importante aún, tal vez pueden ser fáciles de pasar por alto, especialmente en casos de personas con autismo que muestran «alto rendimiento» en sus vidas.

Una de las dificultades que experimentan los investigadores es que las niñas con autismo parecen comportarse de maneras que se consideran aceptables, si no ideales: pueden parecer pasivas, retraídas, dependientes de otras personas, no involucradas o incluso deprimidas.

Dos manos sosteniendo una pieza de rompecabezas cada una.

A nivel nacional actualmente no existen cifras exactas que permitan cuantificar los casos de autismo; todo porque en el último censo de población que se ha realizado, no se ha incluido la pregunta de si existía entre los miembros de las familias paraguayas algún miembro con autismo, según mencionan autoridades del Centro de Desarrollo para Niños, Niñas y Adolescentes.

Además, ni el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) ni el Ministerio de Salud Pública (MSP) se han ocupado de elaborar estadísticas en base a las consultas médicas o a la existencia de niños con autismo en el aula.

Desde el Departamento de Neurología del Hospital de Niños Acosta Ñu estiman que 1 de cada 70 a 100 niños nace con este trastorno y que esta cifra fue en aumento durante la última década.

El diagnóstico de autismo es muy importante porque muchos de los afectados experimentan problemas secundarios de salud mental, como ansiedad, depresión y autolesión.

Si los padres y cuidadores recibieran la información correcta, podrían ser capacitados y adquirir habilidades vitales como el manejo de las dificultades en la comunicación y el comportamiento social, lo que a su vez podría mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas con TEA y las que viven con ellos.

 

FUENTES: ABC – BBC.