Todos queremos a la familia original reunida y, al menos anoche, el deseo se cumplió. Steven Adler, baterista original de Guns N´Roses, se reencontró con sus compañeros en el show que dieron ayer en la ciudad de Cincinatti, Ohio, para sorpresa de todos los presentes.

La multitud del Brown Stadium estalló cuando Axl Rose dijo: “Quizás conozcan a este tipo en la batería. Señoras y señores: ¡el señor Steven Adler!”, y los músicos arrancaron a tocar “Out Ta Get Me”. Al final, Rose sumó: “Me parece que tenemos que hacer otra”, y siguieron con “My Michelle”.

Fue la primera vez que Adler tocó con el grupo desde su expulsión en 1990, cuando fue reemplazado por Matt Sorum (ex The Cult), aunque ya había estado con ellos en 2012, en la ceremonia de ingreso al Salón de la Fama del Rock and Roll.

Hubo muchos rumores y especulaciones sobre la participación de Adler en la tan esperada reunión de Guns N’ Roses celebrada este año. El músico tenía un largo historial de problemas de adicción, además de peleas y desencuentros con los otros miembros.

En una entrevista realizada a VH1, el baterista afirmó: «Amo a esos tipos y siempre lo haré. Pero Duff no piensa bien de mí y Slash no me cree que llevo dos años sobrio. No sé por qué, pero se olvidan de que, en algún momento de sus vidas, ellos también bebían, se drogaban y estaban muy mal”.

Parece que las asperezas se han limado, al menos lo suficiente para una noche de buen rock and roll