El músico británico es conocido por ser un gran militante de los derechos humanos. Durante los últimos años se lo ha visto involucrado en causas políticas y humanitarias.

En los últimos días, Roger Waters, que acaba de finalizar su tour mundial US + Them, volvió a ser noticia. El ex Pink Floyd ayudó a una mujer, Felicia Perkins Ferreira, a reencontrarse con sus hijos, que habían sido secuestrados por su padre (miembro del Estado Islámico) y se encontraban en un campo de refugiados en Siria.

En 2014, Mahmud, de 11 años, y Ayyub, de 7, habían sido trasladados por su padre Abebe Oboi Ferreira, desde Trinidad y Tobago, su país de origen, hasta Siria. El hombre aparentemente falleció en 2017 mientras combatía en Raqqa (Daesh) y desde entonces los niños se encontraban en Camp Roj, un campo de refugiados ubicado al noreste de Siria.

Waters conoció el caso por su amigo Clive Stafford-Smith, actual abogado de la madre, y no dudó en colaborar. Por eso además de pagar los costos de los procedimientos legales necesarios para la repatriación y encargarse de los traslados -poniendo a disposición su jet privado- también viajó con Felicia y Stafford-Smith a buscar a los chicos.

Mahmud y Ayyub ya se reencontraron con su madre y ahora esperan en Londres para volver a su país de origen. Se cree que más de 1200 niños viven una situación similar a la de estos chicos, y se encuentran atrapados en un limbo legal en Siria.

En una entrevista a Canal 4, del Reino Unido, Roger Waters dijo «De esos chicos nos tenemos que ocupar, y los países de los cuales son o eran sus padres, también deberían preocuparse de ellos».