La jornada comenzó con estrictas indicaciones para la prensa. Prohibición total de ingresar a la sala teléfonos celulares o computadores personales -ni siquiera lápices u otros artefactos capaces de grabar o tomar fotos- para los profesionales que llegaron a cubrir el primer día del juicio contra Led Zeppelin, acusados de plagio por su canción más emblemática, Stairway to heaven. Un proceso que en parte podría reescribir la historia del rock, y que comenzó ayer en una corte federal de Los Angeles (EE.UU.).
Hasta allá llegaron, cerca del mediodía, los dos líderes del legendario grupo británico, el guitarrista Jimmy Page y el vocalista Robert Plant, esperados por una multitud de periodistas. Luciendo chaquetas, corbatas y pelo tomado, y acompañados por su abogado, Peter Anderson, los íconos del rock clásico entraron silentes y se sentaron juntos.
Un reencuentro histórico pero en circunstancias poco amigables: ambos son acusados de haber copiado la introducción de Stairway to heaven, uno de los más populares himnos de su catálogo y del rock clásico en general -que sólo hasta 2008 había generado regalías por US$562 millones-, de Taurus, tema instrumental compuesto tres años antes por el grupo estadounidense Spirit.
A la audiencia también llegó el abogado Francis Malofiy, quien representa a Michael Skidmore, albacea del fallecido líder de Spirit, Randy “California” Wolfe. Si bien éste último nunca inició acciones legales contra Led Zeppelin -con quienes coincidió en un par de giras a fines de los 60- fue consultado en diversas ocasiones por las similitudes entre ambos temas, aunque nunca se manifestó dispuesto a demandar a sus colegas hasta su muerte, en 1997. Sí lo hizo Skidmore, quien gestiona su patrimonio y que en 2014 inició un proceso por plagio contra los ingleses.
Argumentación
De acuerdo a los primeros reportes desde el interior de la corte, la audiencia comenzó con algunas instrucciones para los abogados de parte del juez de la causa, Gary Klausner, de “modos secos y rígidos”, según consignó Rolling Stone. Klausner fue quien en abril admitió la demanda, luego de señalar que los abogados de Skidmore entregaron suficiente evidencia para respaldar la acusación.
Luego de esto vino la selección de los ochos jurados que dirimirán la causa, instancia que no estuvo exenta de particularidades. Según Billboard, siete de los primeros catorce candidatos fueron descartados, incluyendo a un fanático de Led Zeppelin que no dudó en declarar abiertamente su “amor” por Page y Plant. Finalmente, fueron escogidos cuatro hombres y cuatro mujeres.
Luego de esto, comenzaron los primeros testimonios de los testigos de ambos lados. De acuerdo a lo explicado por Klauser, la corte le dará un máximo de diez horas a cada una de las partes para exponer sus argumentos, por lo que aseguró que el juicio podría extenderse por cuatro o cinco días.
Entre los testigos presentados por la parte acusadora, figuran dos ex compañeros de Wolfe en el grupo Spirit, Mark Andes y Jay Ferguson (ambos presentes ayer en la audiencia); Linda Mensch (esposa del renombrado mánager Peter Mensch); el empresario musical Lou Adler y también Brad Tolinski, editor de la revista Guitar World y autor de un libro de conversaciones con Page.
Por otra parte, se espera también la presencia en la corte de John Paul Jones, el otro sobreviviente de la formación original de Led Zeppelin, quien si bien fue desestimado como acusado en el caso, ha sido confirmado para testificar por parte de la defensa de los músicos.
Según Rolling Stone, Page y Plant mostraron una serenidad “casi zen” durante el primer día del juicio, y no hablaron ni expresaron reacciones hasta el primer receso de la audiencia.