La cantante Adele tendrá que devolver 3,16 millones de euros a la Hacienda británica después de que se detectara un «embarazoso error» —como explica una fuente cercana a la cantante en el diario The Sun— en sus registros. La artista habría recibido el pasado año como salario 8,8 millones de una de sus dos sociedades, cifra que supera el máximo permitido por la legislación tributaria empresarial de Reino Unido.

«A Adele le gusta mostrarse como una mujer del pueblo, por lo que un incidente como este, que llama la atención sobre su riqueza, no es bueno», ha relatado la fuente al periódico británico. La intérprete, de 28 años, administra su riqueza a través de dos sociedades: Melted Stone y Melted Publishing.

A pesar del daño, el diario explica que Adele —la artista británica mejor pagada tras firmar un contrato con Sony por 116 millones— ha colaborado en todo momento con las autoridades y está en proceso de subsanar el error. «Todo está resuelto ya como indica el informe», ha asegurado la fuente, aunque no especifica a qué informe se refiere.

Sin embargo, la autora de Hello ha tenido más suerte recientemente con su trabajo que con su economía. La cantante ha conseguido una disculpa de su productor, Tony Visconti, quien dijo en una entrevista que «pones la radio y no tiene ningún valor, lo que oyes son voces en un 90% tratadas con el ordenador. Sabemos que Adele tiene una gran voz, pero incluso es cuestionable si lo que estás oyendo de verdad es su voz o cuánto ha sido manipulada».

La británica se dirigió a él en términos groseros durante un concierto tras estas declaraciones y logró que Visconti se disculpara en la revista Billboard, aunque a medias. El productor ha dicho que lo siente, pero que fue un malentendido: «Si Adele se ha tomado mis comentarios de forma ofensiva no era en absoluto mi intención», afirmó.